Ibarra I de Gran Canaria

Luis Ibarra (FOTO: laprovincia.es)

Si han leído las declaraciones del presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, en Diario de Lanzarote, tienen todo el derecho del mundo a manifestarse indignados. Ya el titular  invita al mosqueo. Sostiene Ibarra que las obras en el puerto de Los Mármoles las paga el empresariado de Gran Canaria: esos todos sus amigos que se sientan a su alrededor en el Consejo de Administración y que, de paso, niegan a los conejeros una plaza, o dos, o tres... para discutir los asuntos.

Pero Ibarra dice más. Y de paso, en ese decir, queda no retratado, retratadísimo. Cuestionado acerca de la independencia de Lanzarote de “su” Autoridad Portuaria, (debate que, como el Guadiana, aparece y desaparece de las cuestiones políticas insulares),suelta Ibarra,  el teórico gestor de los puertos de la provincia de Las Palmas, que “la pidan, que nosotros estamos encantados, porque los usuarios del Puerto de La Luz y los consignatarios pensarán que así se quedan aquí las inversiones”.

En ese “nosotros estamos encantados” aparece el retrato canarión de Ibarra. ¿Nosotros? ¿Quiénes? Los de Gran Canaria, naturalmente. Porque él se siente presidente de la Autoridad Portuaria de los Empresarios de Gran Canaria. Y de ningún otro lado más. A ellos les debe pleitesía y quién sabe qué. Olvida que su cargo le obliga a asumir, en su “nosotros” a los puertos estatales de Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote. Sin embargo él reduce ese “nosotros” a lo suyo de ellos.

Y mientras, aquí, echando cuentas a ver si perdemos el Cabildo o no.

Comentario de portada del Informativo Matinal de Biosfera Radio